Capitulo 20 - Mentira Blanca

POV Nessie.

Sentía una respiración sobre la coronilla, una mano en mi cintura, y pude sentir un beso entre mi cabello. Respire profundamente, y el olor que mas me gustaba entro a mis ahora débiles pulmones, un olor a madera y lavanda, un olor cálido y a la vez refrescante, era el olor de mi novio.

Voltee lentamente y mire en la oscuridad, puse ver su sonrisa hipnotizarte, me sonreía ampliamente, era la sonrisa que mas me gustaba.

- ¡Jake! – exclame al tiempo que rodeaba su cuello con mis brazos, y posaba mis labios brevemente sobre los suyos el me correspondió algo sorprendido, envolvió mi cuerpo entre sus brazos, y me abrazo.

Sentí como mi corazón latía desembocado, no podía arriesgarme a sufrir un ataque de taquicardia frente a él, así que lentamente me aleje, lo mire muy de cerca, aun podía aspirar su aliento.

El me miraba con esos ojos intensos, volvió a sonreírme – Hola – susurro, me beso la punta de la nariz y luego brevemente los labios.

Mi corazón estaba descontrolado, la presión había vuelto, pero casi no la sentía. Mire a Jacob y analice mi reacción, era algo tarde pero me sentí avergonzada, tal vez me estaba tomando esto muy enserio, salte sobre el apenas lo vi, eso hizo que la sangre llegara a mi rostro. Baje la cabeza y él me beso la frente.

-Hola – susurre algo apenada

-¿Qué pasa? – tomo mi barbilla e hizo que lo mirara.

Como de costumbre respondí la verdad – Estoy avergonzada…

-¿Por qué?

-Me da vergüenza decirte

Se río - ¿Qué tal si adivino?

Sonreí – Si me conoces lo sabrás.

-Haber….– hizo un gesto de mirar al vacío -¿Es porque me besaste?

Me sonroje – Eres bueno. Acertaste.

-Si – se río – lo sabia – celebro – pero hay algo que no entiendo ¿Por qué te avergüenzas?

-No lo sé, soy una nueva y tu eres tan mayor debes tener una experiencia y luego yo hago eso, te doy besos de los que dan los niños pequeños…

Tapo mis labios con su dedo índice – Tengo menos experiencia de la que crees – se río – además eres mi novia ¿no?

-Si – respondí de inmediato.

-Entonces no tienes razones para apenarte.

Me sonroje aun más.

-Te extrañe – confeso.

Automáticamente lo abrace y él me correspondió. Me beso la coronilla – Yo mas.

-Es increíble cómo te has acostumbrado a nuestra relación, lo digeriste muy bien…

-Es algo que quería…además me acostumbro a todo con facilidad.

-Creí que iba a pasar mucho tiempo, para que al menos me tomaras de la mano…pero tu lo asimilaste mucho más rápido que yo.

-¿Parecí desesperada? – lo mire asustada, ante una respuesta positiva.

-No – me tranquilizo- este sentimiento es muy fuerte… reaccionaste muy bien, aunque yo estaba dispuesto a esperar.

-Ya habías esperado 7 años ¿no? – me reí y él me acompaño.

-Nos queda toda la eternidad, es la ventaja de ser criaturas místicas, no tenemos que apresurarnos…

No quise seguir con el tema, la idea de que esos planes ahora eran posiblemente irrealizables, me llenaba los ojos de lágrimas.

-¿Qué haces aquí? – cambie el tema.

-¿Te molesta que haya venido?

-No seas tonto…. ¿encontraron a Seth?

-No – respondió con tono sombrío – el efluvio que percibió Leah desapareció….de nuevo. Tus padres ayudaron, pero es hábil. Estoy seguro que se percato de su presencia y se fue.

-Que mal ¿Cómo esta Leah?

-Ya sabes es su hermano.

-Pobre familia, si alguien de mi familia desapareciera me moriría de la preocupación.

-Estamos haciendo lo que podemos.

-¿Entonces qué haces en Seattle?, pensé que tardarías mas días.

-Me preocupe.

-¿Por qué?

-Cuando tu familia se regreso, no avisaron, solo desaparecieron. Como si se regresaran por una emergencia.

Mi estómago sintió una punzada.

-No paso nada – lo ataje.

-Por eso vine quería asegurarme que estabas bien.

Lo mire – Estoy perfectamente –sonreí. Me sentí mal por ocultarle mi enfermedad, pero no quería que el también sufriera. Mentía por su bien .Era una mentira Blanca.

-Cuando llegue sentí como una atmosfera de preocupación entre el resto de los Cullen - ¿Por qué tenía que ser tan perspicaz? – pensé con sarcasmo.

-Son ideas tuyas todo está perfecto…. ¿mi padre no se opuso a que pasaras a mi habitación? – pregunté para salirme por la tangente.

-En absoluto.

Bostece.

-Duerme – me dijo mi novio.

-No te irás ¿verdad?

-Seré lo primero que veras cuando despiertes - me aseguro – procura no asustarte – se río.

Bese su mejilla – Te quiero.

-Yo mas, ahora duerme tienes escuela mañana.

Ahora que lo mencionaba no sabía si me dejarían seguir asistiendo al instituto.