Capitulo 28 - ¿Otro Ataque? (P2)

POV Nessie.

Mi respiración pudo resistir tan solo unos minutos más, ya estábamos lejos del prado, o al menos eso creía yo. Emma se bajo de mi espalda, solté a Seth con cuidado, el temblaba, parecía que convulsionaba, tenía los ojos blancos.

Mi amiga se sentó a su lado y coloco la cabeza del lobo sobre sus piernas, comenzó a llorar. Comencé a sentirme peor.

-¡Ness! ¿Estás bien? – pregunto Emma exaltada.

-N…no – tartamudee

-¡¿Qué hago?!

Seth comenzó a temblar más pronunciadamente.

-¿Qué le pasa? – Emma lloraba, imagine por el estrés de que sus únicos acompañantes estuviesen…muriendo.

-El…Ve...Veneno de…vam...Vampiro – tartamudee entre las interrupciones de mi débil respiración.

-¿Qué hago? ¿Cómo los ayudo?

En ese momento recordé “Ay que absorber el veneno”, Había dicho mi padre tratando de buscar una cura para mi enfermedad.

Escuche los sollozos de Emma.

Apenas podía ver, mi vista se hacía más nublada, el dolor aumentaba con el pasar de los segundos. Mire de nuevo a mi amigo Seth y un recuerdo fugaz llego a mi mente.

Un día que le estaba haciendo a Jake un montón de preguntas, que solía hacerle sobre licántropos y las leyendas de la Push le había dicho “Los vampiros y los lobos somos enemigos naturales, tanto que su veneno nos mata, lentamente”.

Esto no podría empeorar. Si absorbía el veneno, habría más en mi cuerpo, eso afectaría aun mas a mi corazón…pero de todas formas yo moriría algún día –Que más da, Seth no puede morir– pensé mientras sacaba fuerzas y me acercaba al gran lobo, tome su cuello y busque el sitio de la herida.

-¿Qué haces? – pregunto Emma.

Puse mi mano en su hombro – Emm, lo mordió un vampiro el veneno es mortal para los licántropos…

-¿Va a morir? – las lagrimas no dejaban de rodar por sus mejillas.

-No, tal vez muera yo.

-¡No Ness! ¡No puedes! ¿Qué hago?

-Solo no veas lo que voy a hacer, cierra los ojos.

Acerqué el cuello de Seth a mi boca, y saque mis afilados dientes a relucir.

-! ¿Qué estás haciendo?!

-Solo no mires.

Pero ella no hizo caso. Escuche los gritos de Emma cuando clave mis dientes en el cuello del lobo. Comencé a succionar la sangre de Seth, para ser sincera su sangre no sabía nada bien, todos tenían razón los vampiros y licántropos eran enemigos, ni siquiera su sangre sabía bien para nosotros. Primero en su sangre había algo acido, que me daba nauseas, supuse que ese era el sabor del veneno. Cuando saboree al característico sabor oxido de la sangre, despegue mis labios de su peludo cuello… el dejo de temblar.

Mi corazón comenzó a latir más rápido, y cada vez podía respirar menos, hasta que sentí que todo se detuvo mi corazón se detuvo en seco, esta vez no pude respirar absolutamente nada, mis ojos comenzaron a pesarme y me sentía en medio de la nada, como si volara. Lo último que vi fue la cara de preocupación y llena de lágrimas de Emma.

-¡Reneesme! – escuche un grito a lo lejos.