ACLARACION LO QUE ESTA ENTRE COMILLAS (" ") SON PENSAMIENTOS O COSAS QUE DICEN NESSIE Y DERICK A TRAVES DE SU DON XD.
-Reneesme, ¿Te sientes bien? – Pregunto el Señor Musso, acercándose a mí parecía algo alarmado.
- “No respires” – escuche en mi mente, obedecí.
Anna seguía mirándome con mirada asustada, su instinto de supervivencia le había advertido “peligro”, ¿eso era yo ahora? ¿Un peligro?... me quede helada ante las nueva sensaciones que estaba experimentando; mi garganta ardía, nunca había sentido un sed tan…fuerte.
- Señor Musso, es obvio que Reneesme se no se siente bien – intervino Derick - ¿me equivoco? – dijo mientras se ponía frente a mí, yo no podía hablar tan solo un respiro y lo arruinaba todo lo que mi familia había construido con tanto esfuerzo, no podía hacerles eso. Extendí mi mano hacia él, tome la suya y me limite a decir “solo sácame de aquí, por favor. No puedo contener mas la respiración”, el asintió al tiempo que colocaba mi mano en su hombro, y la suya rodeaba firmemente mi cintura.
-“Tranquila, solo un poco más” – le deje todo el peso de mi cuerpo, y camine a arrastras, tratando de que el profesor se comiera la historia de una vez por todas.
-Voy a llevarla a la enfermería, profesor – se ofreció Derick.
El profesor asintió – Llévala a la enfermería, y vuelve a la clase Señor Night – escuche cuando salíamos por la puerta, entonces no contuve mas la respiración, inhale profundamente para alivio de mis ya desesperados pulmones medio humanos, esa necesidad biológica no era lo más conveniente en ese momento, percibí de nuevo el delicioso olor.
Mi cuerpo se tenso y rápidamente me libere de los brazos de Deck tratando de volver al lugar donde posiblemente se encontraba lo que sería la perdición de la vida “normal de mi familia”, el con movimientos muy agiles trataba de detenerme, pero yo era más rápida, o eso creía, hasta que sus brazos rodearon fuertemente mi cintura, dejándome pegada de espalda a él, me levanto y comenzó a caminar lejos de allí. Trate de liberar su abrazo de hierro, pero fue imposible, empleaba toda su fuerza en mi.
-¡Suéltame! – exclame quejándome aun luchando con sus brazos, me movía todo lo que podía, clave mis uñas en sus antebrazos el parecía no sentirlo, estaba desesperada, solo quería que me soltara. “Solo un poco” – pensé lamiéndome los labios, no me conocía parecía un animal, pero no me importaba, en absoluto.
-“No te pongas difícil, solo quiero ayudar”
-¡Sal de mi cabeza! – grite.
El libero un lado de mi cintura y con su mano libre tapo mi rostro –“solo limítate a no respirar”.
Mordí su mano, olí su sangre y me dieron nauseas - ¡Puaj! – exclame.
-¡Ay! – exclamo seguidamente el y volvió poner su mano en mi cintura.
-¡Suéltame!
-¡Cállate! – me grito.
-¡Suéltame! – volví a decir el bufo con fastidio.
-“Reneesme, te estoy teniendo mucha paciencia, tengo un límite, deja de comportarte como una niña de cuatro años. Esto es por tu bien, ya toda la escuela crees que estas demente”.
Hasta ese instante no me había dado cuenta de eso, había estado peleando con el por toda la escuela, pero eso no me importaba, eso no era de su incumbencia
-¡Suéltame! ¡Ponme en el suelo! ¡Ocúpate de tus asuntos! ¡Esto no es tu problema! ¡Déjame en el suelo! ¡Ahora! – grite mientras me movía desesperadamente, sin importar si toda la escuela me escuchaba, solo sabía que mi garganta ardía y quería probar esa especie de vino prohibido.
Me soltó de golpe, dejándome en el suelo, me dio la vuelta para que lo miraba, me tomo por los hombros y con mirada amenazante entro de nuevo en mi mente: “¡Cierra la boca de una vez! ¿Qué es lo que quieres? ¿Ir tras ella y arruinar todo? ¿Echar a la basura tu vida?, no sabes lo que es pasarla mal niña mimada, solo trato de hacer que tu familia no te odie por echar todo a perder, así que ahora vas a cerrar la boca, llamare a tu padre y te aras lo que yo te diga, ¿correcto?”
Su mirada eera severa pero parecía sinsero, en ese momento cai en las cosas que había estado pensando hacer, ahora lejos del salón, lejos de Anna, su olor tan atrayente me quemaba la garganta con solo recordarlo, estaba casi recuperada, las llamas que sentía gracias a la sed, solo me picaban. Respire cuidadosamente, el olor no estaba. Unos chicos que pasaban cerca nos miraban fiajemente y se decían cosas por lo bajo.Agudice mi oído.
-“¿Cullen y Night están saliendo?
-No lo se, pero si era asi no creo que tarden en dejar de hacerlo, tiene un buen rato discutiendo, el la trajo arrastrada hasta el estacionamiento”
Suspire, genial ahora empezarían rumores, bueno eso era mejora que supiecen la verdadera razón de nuestra discusión.
El seguía mirándome, tenia el entrecejo fruncido, yo toque una de sus manos apoyadas en mi hombro, y le transmite lo que acaba de escuchar.
-Es mejor que crean eso, a que se enteren que quieres matar a una chica de tu clase – solto con tono acido, se había enfadado.
-Estoy bien – mire al suelo averginzada.
-Al menos dejaste de comportarte como demente – el aun se mantenía atento a mis movimientos.
-¿Podrias soltarme? – musite – me estas lastimando los hombros…
-No.
-Prometo que no hare nada estúpido.
El me ignoro y se limito a comentar.
-Creo que debes saltarte las clases
Bufe – eso ya lo se, lo que no se es que me ocurrió allí adentro – suspire – lo heche a perder, todos deben pensar que estoy loca, cosa que por unos minutos fue cierta pero ¿como voy a explicar…?
No pude completar mi frase.
-¡Suéltala! – escuche un grito, conocía esa voz.
- ¿Emma?
Ella se acerco a nosotros, se veía furiosa, empujo a Derick por la espalda bruscamente, eso era extraño, Emma no era una persona agresiva, era primera vez que la veía molesta.
-¡Te dije que la sueltes, idiota! – volvió a gritar.
Escuche a mis espaldas un chirrido que me lastimo los oídos, Derick me soltó rápidamente y miro con ojos como platos, al ver quien aparecía de la nada, a mis espaldas.
-Te lo advertí, ahora atente a las consecuencias – una voz dura y amenazante que hizo que se me erizara la piel. Cuando me di cuenta, mi padre estaba frente a mí.
Genial, tenía dos personas que me defendían de un peligro inexistente, pobre Derick.
-Papa estamos en medio estacionamiento
- No lo he olvidado.
Derick se dedico a observarlo supe que mostrándole todo lo ocurrido, Edward se puso tenso y me observo aterrado cuando escucho la aceptación de los hechos por mi parte.
Sonó la campana de salida. Emma pareció no notarlo ni preocuparle se quedo parada tras Derick mirándome confundida le dedique una mirada de “luego te explico”. Toda la clase salió al estacionamiento, pues había que pasar por allí para llegar a la cafetería, entonces la vi de lejos, el olor me azoto la cara, mi garganta se prendió de nuevo en llamas. Mi padre susurro “no respires”, le dio mis llaves a Deck, cosa que realmente me sorprendió.
-Tú traes el auto de Ness – Dijo.
Rápidamente nos fuimos al Volvo, Edward piso el acelerador a toda marcha, como siempre pero esta vez se veía la preocupación en su ceño fruncido.
-¿Estás bien? – pregunto ansioso.
-Si. Lo siento, tenias razón no se controlarme.
Suspiro – Esto no es normal en ti, creo saber la razón de todo esto – musito para si mismo.
-¿Cuál? – quise saber.
-Haz descuidado tu caza.
Era cierto, tenía semanas sin ir de caza.
-Lo siento – repetí mirando por la ventana.
El acaricio mi mejilla – Princesa te entiendo perfectamente, yo también pase por algo así.
Suspire - ¿Puedo saber por qué le diste mi auto a Derick?
-Debo saber todo lo que paso, el estuvo allí…además quiero analizar sus intenciones, que para mi sorpresa parecen ser buenas.
-¿Como supiste que estaba con Derick? ¿por que escuchaste eso y no lo que en realida destaba pasando?
-Emma me llamo - contesto el.
Llegamos a casa, mi madre estaba en la puerta, Edward la había llamado, entramos y la casa estaba completamente sola, solo mis padres, Deck y yo.
Bella me abrazo - ¿Qué fue exactamente lo que paso, Edward?
Derick se estaciono frente a la casa, se bajo y un segundo después estaba frente a nosotros.
-¿Qué hace el aquí? – pregunto mi madre enfada, mientras me aferraba más a su pecho.
Puse mi mano en su mejilla y le mostré los minutos más confusos de toda mi existencia.
Tuvimos una larga charla, mi madre todo el tiempo con recelo, me abrazaba como si tratara de protegerme de Derick, el me había ayudado y ahora podíamos confiar en él ¿no?, era como confiar en el enemigo, y no comprendí porque pero le creía después de haber evitado el que pudo haber sido el mayor error de mi vida, me sentía agradecida. El instinto materno de Bella no le permitía confiar en quien alguna vez había planeado la muerte de su hija.
Después de que papa le saco todo el jugo posible a los recuerdos de Derick, lo despacho al parecer le había perdonado acercarse a mí, se lo agradecía muy humildemente al igual que (a pesar de que en una manera forzosa) lo agradecía mama.
-Gracias – le dije con toda sinceridad.
El me miro y sonrió – De nada, tenemos que ayudarnos entre los nuestros – sonrió y salió disparado al bosque.
Al cerrar la puerta mis padres me miraban fijamente.
Me encogí entre hombros – De ahora en adelante, oblíguenme a salir de caza, pónganme carácter por eso estoy tan malcriada
Mi mama sonrió pero mi padre mantuvo un gesto serio.
-Te concedo el deseo de un carácter más fuerte Reneesme – musito.
“Oh, Oh, había dicho mi nombre completo”
-Y tu primera obligación es sacarte la estúpida idea de que volverás a poner un pie en ese instituto – determino con tono autoritario.
Tenían razón de estar enfadados estuve a punto de dañar todo.
Asentí, no se me ocurrió alguna queja, aunque no estuviese de acuerdo con su decisión la aceptaría, después de todo el tenia razón yo era una niña inexperta y estúpida que creía que podía con todo.
Esa noche salimos de caza.
Ya había pasado una semana desde que había dejado de ir al instituto, mi padre se mantenía severo en esa decisión, ahora no salía de compras con Alice, sentía que me trataban como un neonato, bueno me había comportado como uno. Emma iba a visitarme, le oculte lo ocurrido no quería asustarla, pero no se creía el cuento de que Derick solo se estaba disculpando conmigo y que yo había fingido que me sentía mal para hablar con él.
No había vuelto a ver a Derick, tenía tantas preguntas que hacerle, pero ni sabía si a papa le molestaba la idea de que el viniera a visitarme.
El día transcurría lento, como todos, aburrido y con todo el tiempo libre para reclamarme lo ocurrido, con mi mente en blanco para pensar en Jacob. Me mire en el espejo aun llevaba el símbolo de nuestro compromiso ¿a quien quería engañar? No quería dejar de estar comprometida con él, no podía quitarme el collar, eso era un recuerdo permanente pero podía vivir con eso.
Encendí la computadora y revise mi correo, habían como 20 de Renee, ella se desesperaba con facilidad. Casi todos decían lo mismo.
“Hola pequeña, ¿Cómo estás?, no me has llamado en mucho tiempo, ¿Cómo va la escuela?, ¿Cómo esta Jacob?”
Mi abuela estaba enterada de mi relación con Jacob, ella asimilaba todo las cosas extrañas como si nada pasara al igual que mi abuelo Charlie. Respondí los correos, disculpándome por haberla descuidado tanto tiempo.
“Hola Renee, ¿Cómo esta todo?, yo estoy muy bien. He estado muy ocupada con la escuela, disculpa esta misma noche te llamo, últimamente estoy algo desconectada del mundo. Jacob está muy bien. Saludos a Phil. Te quiero.
Ness.”
Había evitado contarle todo lo que había pasado con Jake, no quería preocuparla, si mencionaba que habíamos terminado debía mencionar el por qué y dentro de eso estaba mi enfermedad, le pedí a mi madre que se la ocultara ya me pesaba la preocupación de suficientes personas.
Mi puerta se abrió y salte del susto.
-Hola papa – lo salude mientras hacía clic en “enviar”
-Hola cariño, tu madre quiere saber si vas a almorzar o saldrás esta noche con nosotros.
-Me da igual
El entro a mi habitación, se sentó a mi lado.
-Se que estas molesta pero no quiero que pases por esa horrible situación de nuevo.
-Lo sé papa, soy una idiota por descuidar mi caza, solo soy una niña que no entiende el peligro de las cosas – replique con brusquedad.
-Sabes que esas no son las razones.
- No son las únicas pero están en la lista.
-Eso nos pasa a todos, hasta con un siglo de experiencia.
-Sé lo que te ocurrió papa… - suspire – tu lo enfrentaste yo quiero hacer lo mismo.
Su ánimo paternal cambio a serio.
-No iras de nuevo al instituto, es mi última palabra.
-Sobreprotector – susurre – ¡siento como si no pudiese respirar, el encierro me está matando!
-¿Salir es lo que quieres?
-Sí, quiero salir, volver al instituto, terminar mi año, tener algo en que ocuparme. Solo dame la oportunidad de enfrentarlo, no siempre sentí eso por Anna, tal vez tu teoría sea cierta y solo fue por el descuido…
-Puedo concederte un deseo a la vez – soltó mi madre quien apareció de repente
-¿A qué te refieres? – pregunte.
-Alístate, vamos a Forks, Charlie esta de cumpleaños mañana.
Holaaaaaaaa! aqui esta el cap. 18 xD! espero que les guste voy a tratar de subir el 19 hoy mismo! depende si mi ordenador no se descontrola de nuevo (espero que no) bueno XOXO! espero sus comentarios! byee!
att:
CARO. C.B
2 Palabritas que me inspiran :):
omg!!
ta genial porfa publica pronto k estes bn
Buen capitulo, si no hubiera aparecido Derick quizá que error hubiera cometido Renesmee, la única explicación lógica es la de Edward ya que antes de las vacaciones ella no sentia esa "SED".
Seguire avanzando quiero ver que sucede, te dejo un abrazo cariñoso
MARIA JOSE P.
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