Seguidores

lunes, 6 de junio de 2011

Capitulo 3 - Cena Familiar By: Kammy




CENA FAMILIAR

Pov Renesmee.


El ambiente en mi habitación estaba cargado de soledad. Papá no estaba, mamá se demoraría mucho más en llegar. Mi hermano estaba durmiendo, mi otro “No hermano” se iría dentro de unos minutos. Quería conversar con Seth de lo que estaba pasando. Él me entendería más que nadie. Pero estaba durmiendo y no quería molestarlo.

Llevé mi cuerpo por el cuarto hasta la sala de baño. Decidí ducharme porque no tenía cabeza para dormir. El agua caía constantemente mientras esperaba que se llevara todo lo malo al drenaje. Como si los malos recuerdos se borraran con agua de la llave. Extendí mí tiempo en el baño lo más posible hasta que Jake se fuera. Me vestí con toda la calma del mundo cuando una sensación de angustia me llego de improviso.

Mi celular comenzó a sonar. Era mi madre. ¿Para qué estaría llamando?

- Mamá. Hola ¿Por qué llamas?- pregunte intrigada.

- Hola cariño… solo estaba llamando para que pudiera ver a Seth. Estoy preocupada no me contesta.-

- De seguro esta durmiendo a ahora, nos quedamos hasta tarde ayer. –

- Lo se cariño… pero tengo una especie de presentimiento. ¿Puedes ir a verlo y decirle que me llame lo antes posible?

- Esta bien Ma’ voy a su cuarto. Y le digo que te llame… Ma’ no te preocupes tanto él esta bien. Además necesita descansar… al igual que nosotros –

- De acuerdo un beso…nos vemos ala tarde –

- Te quiero mamá. Adiós – me puse los zapatos y me apresuré a llegar donde mi hermano. Abrí la puerta cuidadosamente. Ahí estaba adoptando la misma posición en la que lo había dejado, boca abajo sobre la cama. Habían pasado tres horas desde que me había ido a la cocina. Me adentre para cubrirlo con las mantas, la mañana estaba un poco fría, además no quería que se resfriara por lo de anoche.

Estaba en acción de taparlo cuando sentí que sus brazos estaban helados. Seth nunca tenía frío. Llevé mi mano hacía su frente. Parecía un hielo.

- Seth… - lo moví para que despertará – Seth… despierta… Seth…- no obtuve respuesta alguna. Como pude lo di vuelta en la cama para que se abriera los ojos. Pero nada ninguna señal. – Seth… Seth… levántate… mamá quiere que la llames – dije. Seth siempre obedecía a las palabras de mamá.

Estaba tomando sus manos cuando ví un frasco de pastillas. Se las quité y me di cuenta de que eran las pastillas que le había recetado a Jake tiempo atrás cuando tenía depresión. Instintivamente las manos comenzaron a temblarme.

- Seth… - pronuncié abriéndole los ojos. Estos estaban desorbitados. Esto no podía estar pasando. Mi hermano no podía haber echo esto – Jake…..- grite con todas mis fuerzas. Esperaba que todavía no se haya ido de la casa – Jake… ayúdame – intente reanimarlo para que respirara – vamos Seth no puedes hacerme esto… Jake maldita sea ven aquí…. 1…2…3…- intentaba darle respiración boca a boca para que respirara pero no estaba funcionando. Escuche de la nada como los pasos de Jake se hacían más rápidos en el pasillo. Abrió la puerta de golpe.

-¿Qué ocurre?... Nessie que pasa…- pregunto desde donde estaba. No podía responderle. Mi concentración solo estaba en hacer que mi hermano vuelva ha abrir los ojos.

- Seth…no respira… – pronuncié entre cortadamente.

- Déjame hacerlo… llama al 911…- dijo alterado por lo que estaba pasando – Reneesme Llama ahora…- me grito desesperado. Tome el teléfono del velador y marque. Mientras esperaba que me contesten veía como Jacob intentaba que Seth pudiera respirar de nuevo.

- 911, ¿En que puedo ayudarle? –

- Mi hermano… mi hermano ingirió pastillas. – mi voz temblaba por el miedo

- Vamos Seth respira… por lo que más quiera respira pequeño…- pronunciaba Jake fuertemente.

- ¿Cuál es tu nombre? –

-Soy Reneesme…Reneesme Cullen…por favor envíen la ambulancia de inmediato- mis ojos no paraban de votar lágrimas. Mi hermano se estaba muriendo. Seth se estaba yendo de mi lado.

- Por Dios…hermano… respira… - gritaba Jake para que Seth despertara. Ya no quería ver. – Vamos…vamos tu puedes volver… Seth no nos dejes…- le suplicaba.

- Señorita Reneesme Cálmese… ¿Puede darme su dirección? –

- Vivo en 4th…Aven… en Seattle… - los sollozos no me dejaban hablar claramente.

- Por favor mantenga la calma ya hemos enviado una ambulancia no se preocupe…pude decirme si su hermano esta respirando – mire al Jake que todavía estaba reanimándolo.

- No, no esta respirando… por favor ayúdeme – me agarré más fuerte al teléfono. Intente mantener la calma pero esto me estaba superando. Quería ser fuerte en esta situación para ayudar en lo posible a que mi hermano pudiera volver. Pero mis rodillas estaban flaqueando. Mi cuerpo quería rendirse y caer al suelo. Más mis ganas de saber que Seth estaría bien me impedían desmayarme.

El sonido de la ambulancia retumbo en las paredes. Colgué el teléfono sin decir ni gracias. Corrí a toda marcha para dejarlos entrar. Abrí la puerta y les indique que me siguieran. Llevaban una camilla en conjunto con una serie de aparatos. Una mujer y uno hombre eran los que venía a ayudarnos.

Entraron en la habitación e intentaron apartar a Jacob de Seth.

- Por favor… Joven déjenos ayudarle – dijo amablemente la mujer.

- 1…2…3…4 – seguía intentando reanimar a Seth. Estábamos perdidos. En que momento Seth había dejado de ser un chico bueno y feliz a ser un suicida. A querer morir sin pedirnos ayuda. Sentía que todo se estaba viniendo abajo. Nunca en mi vida había estado tan cerca de la muerte como ahora. Y se sentía como una completa angustia contenida inundaba mi corazón. Me acerque para que Jake pudiera entrar en razón y lo soltara.

- Jacob déjalo…ellos nos ayudaran…Jake mírame…déjalos ayudar a Seth- me miro atormentado. El dolor de saber que no podíamos hacer más que esperar lo estaba volviendo loco. Lo tome del brazo y deje que los paramédicos hicieran su trabajo. Me abrace a Jake para no ver lo que le harían a Seth continuación. Se escuchaba como la pequeña maquina sonaba emitiendo energía.

- Cargando…- pronunció un de ellos. La maquina volvió a sonar y se percibía como el cuerpo de Seth golpeaba contra la cama. – Cargando…- dijeron de nuevo. Me aferré más a Jake para no escuchar. – Cargando…- esto me estaba matando. Sentía como Jacob me abrazaba. Quería irme con mi hermano. Me dolía cada vez más saber que esto nos estaba pasando. –… Necesitamos entubarlo…- volvía a mirar cuando dijeron eso. Levemente el pecho de mi hermano comenzaba a elevarse por que el aire estaba entrando a sus pulmones. No era alivio el que estaba sintiendo, era la esperanza de que mi hermano viviera. De que Seth viviera.

Lo subieron a la camilla. Y comenzaron a salir del cuarto. Los seguimos muy de cerca. Ya una vez dentro de la ambulancia le proporcionaron oxigeno. Estábamos en la esquina más alejada del estrecho espacio abrazados, esperando que nos dijeran algo concreto. El paramédico le hacía preguntas a Seth pero el no estaba respondiendo. El viaje al hospital fue eterno. Lo seguían examinando cuando otra vez dijeron “cargando”. En esta ocasión pude ver como le propinaban golpes de corriente para que no se muriera. Si pudiera haber gritado de dolor lo hubiera echo. No podía creer a lo Seth había llegado. Tomaba fuertemente la mano de Jake cada vez que el cuerpo de mi hermano rebotaba en la camilla. Solo podía llorar conteniendo los gritos que mi alma estaba emitiendo.

Volvieron a darle oxigeno cuando la ambulancia se detuvo. Nos abrieron la puerta y salimos dándole espacio a la camilla para pasar. Avanzamos como locos por urgencias mientras Jake se quedo en la entrada intentando rellenar papeles burocráticos. Me cerraron el paso diciendo que no podía ingresar a esa zona.

Me quede parada en medio del pasillo viendo a lo lejos como seguían avanzando con Seth en la camilla. Lleve mis manos a la cara para de alguna manera no derramar tantas lágrimas. Millones de preguntas sin respuestas cruzaban por mi cerebro pidiendo auxilio. Mi cabeza no estaba asimilando lo que ocurría. ¿Por qué el había querido acabar con su vida? No lo entendía. Puede que no hayamos sido su familia pero lo amábamos. ¿Por qué nos quería abandonar? Estábamos para querernos y entendernos en todo. No quería creer que la verdad había acabado con la vida de mi hermano. Si hubiera previsto esto, habría intentado lo humanamente posible para que él nunca supiera la verdad. No sabía donde estar para llorar y gritar todo lo que quisiera.

Intente calmarme pero no lo pude. Mis lágrimas no querían irse, avance como pude hacía la pared. Mi mano izquierda se afirmo en ella y la derecha estaba en mi boca para intentar que ningún sollozo saliera. Después de un momento mi cabeza fue a dar a la misma muralla blanca. Cerré mis ojos para no ver nada más. Si antes las cosas habían cambiado ahora lo hacían para peor. Esto era mi culpa. Mi maldita lengua había hecho que todo girara en 180 grados. Es verdad que una acción lleva a la otra. Si pudiera detener el tiempo y volver a la cena me habría contenido de insultar a Jake por una única vez. Así no estaría lamentando que Seth tuviera una sobredosis de anti-depresivos.

Tenía miedo de que esto acabara más mal que bien. Sentía angustia por que Papá y mamá se enteraran de esto. Aunque no lo hubieran dicho estábamos a cargo de Seth en ese momento. El cansancio de la situación me estaba consumiendo. Había pasado una noche entera sin dormir. Esta era la peor mañana que me había tocado vivir. Un “No hermano” medio muerto y otro “No hermano” sufriendo. Si existiera alguna manera para parar la maquinas de las tragedias lo haría, pero al parecer no había solución. Solo esperar lo que digieran los médicos.

En mi vocabulario no estaba la muerte. No me cabía en la cabeza que Seth haya intentado matarse. ¿Es que acaso los problemas lo habían superado? Para mi era demasiado duro saber que él no era de mi familia. No podía imaginar lo que para Seth significaría perderlo todo. Pero siempre había solución para todo. Y esta vez no era la excepción.

Me sentí más aliviada cuando unos fuertes brazos me infundieron fuerzas.

- Nessie. Cariño… ven conmigo- dijo Jake atrayendo me a su lado. Estuvimos así mucho tiempo. Esperando que de alguna manera Seth saliera por la puerta de urgencias con su característica sonrisa diciéndonos que todo estaba bien. – No entiendo por que lo hizo… quizá debí decirle la verdad… hace tiempo…- quizá debimos hacer muchas cosas, pero no las hicimos. Quizá debimos estar con el acompañándolo p ara que no se sintiera solo. Quizá debimos tomar en cuenta sus sentimientos antes que los propios. Quizá debimos madurar antes de tiempo confesando nuestras verdades con el fin de evitar tanto pleito como hermanos.

- No es tu culpa… pero tampoco se porqué lo hizo…- dije susurrando. Seguíamos llorando en silencio esperando que todo acabara. Levante mi mirada para encontrarme con los ojos de Jake. Estaban un poco rojos he hinchados de tanto llorar. Para que decir los míos. Respire profundamente para ventilar mis pulmones. – Llamaste a papá y mamá…- no podía acostumbrarme a tratarlo de otra manera. Aunque hayan pasado situaciones reveladoras y contradictorias, ellos seguían siendo mi familia.

- Si los llamé… pero no me dejaron terminar de contarles… Bella no siguió hablando y corto. Ed dijo que ¿Cómo había pasado esto?... y que vendría de inmediato - comento un tanto preocupado. No se puede explicar como debe sentirse un padre al saber que uno de tus hijos quiso matarse. Esta situación era torturarnos en vida. De un momento a otro mis piernas comenzaron a acalambrarse me resbale un poco pero Jake me alcanzó a sostener.

- Es mejor que te sientes – dijo sosteniendo todo mi peso en sus brazos. Nos sentamos uno al lado del otro dándonos apoyo con la mirada. Tomo mi mano mientras se recostaba en el asiento. Miraba mis pies esperando que el doctor saliera a darnos algún tipo de noticias. Se escuchaba como las personas caminaban de un lugar a otro soportando la espera. Otros que llegaban a preguntar por sus familiares. Un llanto de bebé más lejos al final del pasillo.

No tenía nada más que hacer. Mi preocupación por Seth crecía conforme pasaban los minutos. El reloj de la pared quería traumatizarme con sus movimientos lentos. Había pasado cuarenta minutos exactamente y no había novedad alguna. Papá y mamá no habían llegado aún. El Doctor no había salido a darnos ni una luz de esperanza. Comencé a pasearme de un lado a otro mientras Jacob se estaba mirando las manos. Mi cerebro procesaba todo más lento y había veces en que quería bloquearse.

Entre paso y paso levante la vista hacía la entrada donde ví como mamá y papá venía caminando apresurados.

- Papá…- dije para mis adentros. Fui a su encuentro. Veía como sus ojos estaban tratando de contener lágrimas. Lo abracé fuertemente, quería sentirme segura al estar con él. – Papá… no se que pasó… Pa’ no se porque quería matarse…- le explique intentando que mi voz no tiritara por los nervios que tenía. No comento nada. Solo se limito abrazarme. Podía escuchar como Jake trataba de consolar a mamá. Esta vez nos tocaba ser fuerte para ella. Seth era su hijo. Lo había criado desde que tenía un año de vida. Era parte de ella tanto como lo éramos Jake y yo. Sus llantos eran del alma. Era un sonido que no quería volver a escuchar. Era como si su espíritu se hubiera desgarrado de dolor.

- Mamá tienes que estar tranquila… Seth nos necesita ahora…- le dijo Jacob antes de que ella se desmayara. La sentamos en uno de los asientos mientras papá pedía a una enfermera que nos ayudara. La llevaron a una sala para poder estabilizarla. Jake la acompaño mientras Ed y yo esperábamos sentados alguna noticia.


“Los familiares de Seth Cullen…”

Nos paramos al mismo tiempo y caminamos hacía el doctor. Era un poco joven para ser médico. Alto, de cabellos rubios, unos ojos extremadamente azules nos miro atentamente.

- Soy el Doctor Dylan Roberts. Quiero decirles que el estado de Seth es de extrema gravedad. Sufrió de una alta sobredosis de Anti-depresivos. Lo más importante es que no cayó en un estado de coma. Esta conciente pero no nos ha hablado. Ha respondido levemente al lavado de estomago que le hicimos. Lo más probable es que tenga que permanecer un buen tiempo en el hospital. – Me observo atentamente – Por el momento Seth no podrá recibir visitas hasta mañana así que tendrá que esperar – dijo sonriendo tiernamente

El alma me volvió al cuerpo por saber que dentro de todo el caos mi hermano estaba vivo. Había esperanzas de verlo mañana y que las cosas estaban tomando forma nuevamente. Nos quedaría esperar nuevas noticias. Me abracé a papá cuando el médico se fue. Emprendimos el camino hacía los asientos acomodarnos para pasar unas buenas horas en el hospital.

- Reneesme deberías ir a casa para descansar- lo miré atónita por lo que me estaba diciendo “Irme a casa”. No podía hacer eso ahora mi hermano me necesitaba.

- Que dices Pa’. Quiero quedarme. Quizá nos dejen verlo antes – esperaba que así sea. Todavía existía la ilusión de verlo después de todo.

- Necesitas dormir, además no querrás que tu hermano te vea con esa cara de muerta que tienes - se reía mientras revolvía mis cabellos, fueron unos breves momentos de alegría. Paro de reír y su mirada se perdió en los recuerdos - Quise hacer lo mejor para él, intente protegerlo de todo las abominaciones del mundo. Pero creo que fue un intento inútil. – su semblante cambio instantáneamente. Parte de la culpa se sentía en el aire. No dijo nada más porque no era común en Ed revelar sus sentimientos. Solo lo hacía con mamá y era algo que me gustaba ver como se amaban tanto. – Será mejor que vayamos donde Bella a darle las noticias – se levanto y comenzó a caminar.

A pesar de ser su única hija no podía traspasar la barrera que mi padre imponía a su alrededor. Podía ser tan frío como a la vez tan autoritario. Muchas veces había intentado conversar con sobre temas importantes pero me evadía al igual que a los demás. Para Ed. Las demostraciones de sentimientos eran mostrar debilidad. Llegamos a la sala donde estaba mamá. La cara de pánico que tenía cuando la enfermera se dispuso a inyectarla fue muy graciosa. Papá se adelanto para tranquilizarla un poco y dejar que le administraran calmantes.

Le estaba dando las buenas noticias sobre Seth cuando se me quedo mirando

- Y tu todavía sigues aquí pequeña – miro a Jake – Hijo lleva a tu hermana a casa debe descansar – nos observo a los dos - Ambos deberían descansar. Nos quedaremos aquí esperando si el Doctor nos dirá algo más – le lanzó las llaves de su auto a Jake. No quería moverme de ahí, menos que Jake tuviera que llevarme. No se porque motivo los recuerdos de la llamada que interrumpió oportunamente mi momento romántico con Jake volvieron como Yo-Yo. La rabia comenzó a crecer. ¿Por qué mi corazón quería creer mentiras? Nunca podría tener una relación con Jake. Sobre todo ahora que el ya estaba en una. Ninguno de nosotros conocía a Rose ni había tenido algún tipo de conversación, pero desde ahora ya me caía de la patada. Controlar mis gestos en estos momentos me delataban sola.

No mire a Jacob porque tenía ganas de golpearlo. Tenía ganas de armar un escándalo de proporciones sin motivo alguno. Me había dado cuenta que nada de lo que quería resultaba. No se porque me sorprendía esto, pero al parecer en el fondo de mi corazón había un dolor guardado que quería manifestarse de alguna forma. Y esa forma era hacerle la ley del hielo a Jake. Eso era, así lo haría.

Me abracé a mama para darle mis fuerzas. Tenía cara de estar sufriendo intensamente por esta situación. No era normal vivir esto. Menos para una madre, que tu hijo lleno de vida pretenda acabar con su felicidad de la noche a la mañana.

- Te quiero mamá. – Le dije esbozando una pequeña sonrisa – todo estará bien. Te lo prometo –

- Eso debería decirlo yo, cariño – pronuncio en forma de reproche.

Me despedí de papá y comencé a caminar sin detenerme. ¿Quién quería esperarlo? Yo no. Bueno si, quería caminar con él de la mano, sonriéndole a todo el mundo por el solo hecho de estar con él. Pero como no era ese el caso me tocaba revolcarme en mi miseria y seguir con paso firme. Espere a que llegara y abriera el auto.

De vuelta a casa fue lo mas frustrante y doloroso. Saber que en este lugar había cambiado nuestras vidas de bien a mal me producía cierta agonía. Era como volver a revivir momentos de angustia. Iba directo a subir la escalera cuando sentí que sus brazos me elevaron del suelo y retrocedimos hasta la sala. Se sentó en el sofá colocándome en sus piernas como si fuera una pequeña niña. Intente safarme de su agarre pero su fuerza era superior a la mía.

- Ya suéltame… Jacob Cullen bájame ahora - dije como decía papá cuando exigía algo.

- No te soltare por que esta es la única manera que veo para que no te alejes de mí nuevamente – ¿Él quería que yo no me aleje? Sin duda alguna quería volverme loca. Yo sabía que estaba jugando conmigo. ¿Por qué querría que lo confortara en estos momentos? Para ese tipo de cariño tenía a su “Linda Rose”. Quizá si no me movía por un buen tiempo se relajaría y podría escapar de su agarre. Me quede en estado de estatua.

Con su brazo izquierdo tomo mi mano izquierda, intente resistirme pero me gano otra vez, he hizo que mi brazo cruzará por detrás de su cuello. Ya esta completamente derrotada entonces uno de sus brazos cruzaba mi cintura mientras que con su mano recorría lentamente desde mi codo hasta la punta de mis dedos. Comencé a sentir hormigueos en todo el cuerpo en esa acción. Que más podía hacer si no que dejarme llevar por primera vez a conciencia. Se sentía mal estar en esta situación. Sobre todo si sería la otra. Pero esto me superaba en todos los sentidos.

Apoye mi cabeza contra el costado de su cabeza. Estar en esa postura me daba acceso a respirar su exquisita fragancia. Permanecí por mucho tiempo entre inhalación y exhalación me estaba quedando dormida. Aunque me negará estar con él me producía paz interna.

- ¿En qué piensas? – pregunto entrelazando nuestras manos.

- ¿En que piensas tu? – dije con pocas ganas. Mi mano comenzó a acariciar su cabello de arriba a bajo.

- Pues pienso en que pasara con nosotros, después de que todo esto acabé. Quizá Ed no lo tome muy bien pero estaré dispuesto a irme de casa si tu estas conmigo – pronunció con tanta seguridad que me dieron escalofríos. Eso sonaba tan encantador y halagador al mismo tiempo. Me daba esperanzas para creer que él amor había llegado. Para que le daba tantas vueltas al asunto, hacer eso sería perder valioso tiempo. No tan solo era lo que Jake estaba diciendo si no todo lo que el hacía, era lo que me atraía mas a él. Era la vulnerabilidad que demostraba en estos momentos la que lo hacía parecer más tierno. Jacob ya no era el sin sentimientos que rondaba por la casa, era una persona que tenía corazón, esta nueva parte que estaba mostrando me gustaba cada vez más. Estaba dispuesta a dejarme llevar.

- No dirás nada - no había nada que decir. ¿Para que decir algo? Para darme cuenta de que esto era un sueño. De que estaba jugando con la felicidad de alguien más. De que era una mentira que me quería tragar sin protestar. Aunque Jake estuviera dispuesto a ganarse el odio de Papá no había solucionado nada con respecto a su novia. No estaba dispuesta a ser la entrometida de cierto modo. Como balde agua fría me cayó la verdad en la cara. Jake no era mío, no tenía derechos sobre él. Nunca hubo un nosotros antes menos lo habría ahora. Un ahora que no tenía ni pies ni cabeza. Mi cerebro estaba echo un caos por tanto dilema sentimental que estaba teniendo en esto momentos.

- Jake. Nunca a existido un nosotros- mi mano se deslizo de su cabello cayendo en su hombro.

- Entonces. Que pasara entre tu y yo - se volteo para mírame. Intente alejarme lo que más pude dentro del estrecho espacio que había entre nosotros.

- Nada va a pasar entre tu y yo - me dolió demasiado decir aquellas palabras. Pronunciar aquella frase fue la sentencia de muerte para mi corazón. Era como encadenarlo a una piedra. Ya era tarde para arrepentirse de haberlo dejado entrar en mi corazón. Pero no era tarde para escapar. Aun no se había anidado el amor después de todo. Pero conforme pasaban los minutos podía sentir como crecía de una manera impresionante.

- Ósea que estas negando que siente algo por mi - si lo estaba negando en su cara, pero no era lo que sentía realmente. Me observaba intensamente como buscando la respuesta en mis ojos. Respuesta que hallaría del todo si seguía acercándose peligrosamente. Me estaba aturdiendo cada vez más mientras continuaba viendo sus ojos.

- Si lo estoy negando. Además no puede haber algo entre nosotros...somos hermanos... en esa condición nunca habrá un tu y yo - por favor que funcione. De esta manera se podía evitar algo de daño que nos causaríamos si seguíamos con esto.

- Mientes. Esta mintiendo... - su tono de voz iba cambiando hasta tornarse rabioso - ...Vamos, di la verdad. Estoy seguro de que sientes algo por mi.... no te escudes en que soy tu hermano... porque deje bien claro que no lo era - Rayos. Podía ser tan susceptible, tan perceptor de las cosas, que hasta sabía lo que estaba sintiendo en estos momentos. No cedería en esto. Esta era una conversación estúpida que no nos conduciría a nada. Además no daría mi brazo a torcer tan fácilmente como por lo visto él no desistiría de su interrogatorio. Jake no había dicho que yo le gustaba o que mucho menos me amaba, así que yo no daría marcha atrás. Si el quería una respuesta tendría que confesar primero.

- No estoy mintiendo - pretendía seguir firme. Esperaba que creyera esto.

- Te conozco. Por una vez se sincera contigo y dime la verdad- que me parta un rayo entonces. Que más daba me entregaría en esto.

- Esta bien... Jake...- y aquí iban mis palabras - yo...yo... quería decirte que... tu… - bendito seas - tu celular esta sonando - Gracias al cielo por que su móvil sonara. Bendita sea aquella persona que se había dispuesto a llamar a Jake en estos momentos. Dejo de abrazarme dándome espacio para arrancar. Un par de movimientos y ya estaba parada en el suelo dispuesta a salir huyendo nuevamente.

- No te iras - me tomo fuertemente del brazo mientras miraba su teléfono. Su semblante cambio llegando a una total agonía. Me preocupe un poco. "No te preocupes por él" gritaba mi cerebro.

- ¿Quien es? -

- Rose... - vaya era su novia. Su noviecita. Comencé a sentir una rabia inexplicable.

- Ah. Es ella - quise decir restándole importancia pero sonó como si realmente estuviera enojada. Una leve sonrisa se marco en su rostro.

- Lo que escucho en tu voz son celos - ni siquiera sabía que era eso. Pero si fuera lo que estaba sintiendo se sentía algo asqueroso

- Pufff... No son celos. Celosa yo ¿Por que tendría que tener celos? No estoy celosa. No lo estoy. Es tu novia - dije sin tomar aire.

-Pues si no estas celosa, no te molestara que le conteste a mi novia - pronunció divertido de esta situación, que por mi parte yo no encontraba para nada graciosa. Es más me producían ganas de querer golpear a todo el mundo.

- Adelante. Contesta - desvié mi mirada mientras seguía forcejeado para que me suelte.

- Lo siento "Cariño" por no poder contestar...No, no estoy ocupado...- claro y yo estaba pintada - Ah, es mi hermano esta en el hospital... - ¿Por qué tenía que hablarle a ella de Seth? - Prefiero que hablemos de eso cuando nos veamos...- Si quería verla por que no se larga ahora y me dejaba en paz - Gracias por preocuparte "Mi vida" - esto era lo que necesitaba como prueba. Ella era realmente importante para él -... Te veo luego. Si... "Yo también Te Amo". - cuando dijo eso no puede hacer otra cosa que aguantarme las ganas de patearlo en el suelo. Estúpido que se atrevía a burlase de mi. Era una mezcla de sentimientos, dolor, angustia, pena, rabia, ira, todas ellas se juntaban para formar un trago amargo que bebí de una vez. Quería enredar mi mano en los cabellos de su novia y hacer que su cabeza se estrellara fuertemente contra la mesa varias veces. Después de todo lo que había llorado esta mañana no sabía de donde se me había escapado una lágrima. Solo me percaté de ello cuando la sonrisa de Jake se borro por completo para abrir los ojos de la impresión. Levante mi mano derecha para secar esa lágrima que me había delatado. Era un dolor inexplicable el que esta sintiendo en estos momentos. Para que me había dicho momentos atrás que soportaría la ira de mi padre con tal que yo forme parte de su vida. Y ahora me lanzaba a la cara que amaba a su Rose.

-Nessie - susurro. De un solo jalón me quite sus manos de encima.

-No me vuelvas a tocar, imbécil - cuando le di la espalda volvió a aparecer frente a mí.

- No te iras otra vez. No quiero que arranques de mi de nuevo - me bloqueo el paso a la escalera. Intenté empujarlo con toda mi fuerza pero él no se movía ni un centímetro. Decidí rodear la mesa de centro que estaba a un costado. No se porque insistía en querer hablar conmigo si había dejado bien en claro que yo no era más que la niña ilusa que creyó estar enamorada de su "No Hermano". A cada paso que daba, él daba uno en la misma dirección.

- ¿Que quieres de mí? Ya te reíste de Reneesme ahora déjame en paz. Me aclaraste todo. Como dije solo seremos hermanos - estaba comenzando a gritarle de la pura impotencia de saber que esto era predecible. Que yo sabía que esto pasaría tarde o temprano.
- Quiero que me escuches... Yo Te Amo - aunque me sorprendiera que me lo dijera en este momento no era cierto. No se podía amar a dos personas al mismo tiempo.

- Esta mintiendo. Eres un bastardo mentiroso. No intentes arreglar lo que ya rompiste - me moví nuevamente dejando que las lágrimas fluyen de una vez por todas

- Entonces si te importo – dijo esperanzado

- Si. Siento cosas por ti. Pero acabas de matar el poco cariño que te tenía –

----------------------------------------------

SIENTO DEJAR EL CAPI HASTA AKI...PERO SE HABIA ALARGADO MUCHO...JAJAJA... ESTABA INSPIRADA LO RECONOZCO...JAJAJA... PROMETO COMPENSAR EN EL QUE SIGUE...JAJAJA... GRACIAS POR SUS COMENTARIOS Y OPINIONES... ME HACE FELIZ DE KE LES HAYA GUSTADO LA SEGUNDA PARTE.... ESPERO KE ESTE NUEVO CAPI LES GUSTE TANTO COMO LOS ANTERIORES... LO KE SIEMPRE DIGO COMENTEN Y PORFA PUEDAN DEJAR SUS PALABRAS SOBRE KE PARTE DE ESTE CAPI LES GUSTO MAS...KE ESCENA O SITUACION...JAJAJA... YA NO ME ALARGO Y ME DESPIDO...KE LAS FUERZA LAS ACOMPAÑE JOVENES JEDI...JAJAJA...

BESOS

kAMMY

--------------------------------------------------
Hola chicas ^^" capi de cena familiar que se que les gusta este fic, yo lo amo *-*" en fin, espero suss comentarios para mi hermana c: gracias por visitar el blog y tomarse tiempo para leer.
Las Adoro
CaroR

2 Palabritas que me inspiran :):

Anónimo dijo...

simplemente amo la historia. a comerme las uña y a esperar hasta el proximo!!!

Noelle

Macarena'Alejandra. dijo...

o.O!!!
dejen de tenerme con la incertidumbre!!!
ya no me qedan uñas por dios!!! xD
publiquen prontoo y...KAMMY digue dejando la historia asi! y me acrimino con tigo xDD
un beso
Bye Bye!!